Stock Ticker

12 de marzo de 2014

De la política económica y el BCRA

Por qué he dedicado los últimos post al BCRA?. Simple, porque es el único que parece entender que tenemos problemas y no menores, aunque desde economía se opine lo contrario. No hagamos demagogia, difícil sería pedirle al gobierno el blanqueo de todos los problemas, sobre todo porque ello implicaría brindar soluciones al respecto. A estas alturas nos conformamos con que deslicen los problemas entre líneas, hasta con tono irónico, incluso sin reconocerse causantes, pero  demostrando un cambio de rumbo simple, sin ingeniería económica, pero cambio al fin. Además tengo la sensación que si se hurga un poco en el corazón del gobierno, es probable que solo tenga que hacer consciente lo que su "alma" le está sugiriendo. Una especie de baño de Deepak Chopra para el dirigente político. Ejemplo, si reconociste que en enero la inflación mensual fue de 3,7% o que necesitabas un nuevo “vector de competitividad”, tal vez no estemos muy lejos de reconocer que la tasa de inflación anual está por las nubes y que la causa fundamental, aunque no la única, es el agujero fiscal creciente financiado con emisión monetaria.

Un primer Plan, nada sofisticado, que funcione como ancla inflacionaria sumado a ciertas señales de reducción de la tasa de crecimiento del gasto, aunque no suficiente, sería un aliviador importante a falta de algo mejor. Tal vez solo con esto podríamos evitar en un par de meses un nuevo y no querido salto devaluatorio debido a que toda la depreciación real se terminó licuando por el pasaje a precios. A propósito, ya perdimos aproximadamente el 30% de lo ganado con la devaluación de enero. Parece que perdimos el “miedo a flotar” que popularizó Carmen Reinhart a fines de los 90´. INSISTO, no necesitamos poner en funcionamiento un súper plan, podemos empezar por dar las señales correctas. Ejemplo, es probable que podamos acostumbrarnos a vivir con alta inflación un tiempo, aunque obviamente sería deseable su reducción año a año, lo que parece muy complicado es no tener un ancla que nos aproxime cuál va a ser la tasa de inflación anual. Encima luego deviene el error de tomar como ancla inflacionaria al dólar. El no poder planear es un factor grande de preocupación. Tiene cierta lógica. Casi nunca nuestra historia económica tuvo en cuenta las expectativas de los agentes en orden de trazar un sendero ordenado y algo “aburrido” de desarrollo y crecimiento económico. Obviamente para ser serios deberíamos definir un Plan que tuviera como prioridad aumentar la tasa de inversión, estancada en 21% del PBI, pero primero lo primero.

Dijimos que íbamos a hablar del BCRA, así que disculpen el párrafo anterior. Catarsis tal vez. Decía que la entidad parece la menos miope intentando imponer ciertas medidas. Que hizo de bueno?. Logró estabilizar al dólar y frenar la corrida cambiaria. Y de malo?. Vamos a un parate de la actividad económica y a una pérdida del valor del peso que no detiene su marcha. Parece que lo de "reserva de valor" ya lo podemos empezar a obviar. Lamentablemente esto también tiene cierta lógica en la medida que no exista una política coordinada entre los decisores económicos. Esperemos por lo menos que los números de inflación de febrero que se anunciarán el 17/03 sean de tono realista como el de enero y sigamos por este camino de sinceramiento, inútil sin medidas correctivas, pero bueno….algo es algo, peor es nada. Además la esperanza es lo último que se pierde. Dijiste esperanza? En economía?. Si lo dije. Por lo pronto un piso de 4,2% de inflación para febrero podría considerarse realista.

Volvamos al BCRA. Acaba de presentar su balance cambiario con datos de cierre para el 2013.  


Que podemos extraer de aquí?

En primer lugar que la cuenta corriente finalizó el 2013 con un déficit de USD 13.277 milllones. El primer año que el BCRA registra un saldo negativo y abultado. Si seguimos la serie desde 2003 hasta 2013 vemos saldos crecientes (superávit) hasta el año 2009 que comienza a revertirse. Año donde además comienza a atrasarse fuerte el tipo de cambio. Esto claramente indica un problema de competitividad. Notemos como cae fuerte el saldo por mercancías, pero también por servicios. Las rentas por otro lado muestran una mejora relativa con respecto al ciclo 2011 – 2013. Es necesario tener en cuenta que en estos años fueron restringidos los giros por utilidades y dividendos. Y por el lado de las reservas?. Los números no mienten, solo para el año 2013 éstas cayeron en USD 11.825 millones. Todo un récord si lo comparamos con los tres años anteriores. El movimiento de capitales luce algo más "equilibrado", aunque se destaca la salida de divisas por cancelaciones netas de deuda. En contraposición con otros años la formación de activos externos, comúnmente llamada fuga de capitales, esta vez es positiva en USD 400 milllones. Esto es, el sector privado no financiero (público en general) se desprendió de ese monto en el año 2013.

Que me querés decir con esto?. Nada que no sepamos, simplemente que el atraso cambiario no es un invento sino algo concreto y real que claramente se refleja en una importante pérdida de competitividad. Menor competitividad son menores saldos exportables y menores reservas. Ergo cualquier superávit por cuenta corriente solo puede darse vía una caída en la importaciones. O sea un ajuste por recesión. Es con una devaluación que arreglamos el asunto?. Ciertamente no. El sistema exige un Plan coordinado sobre todo en el frente fiscal. Reitero, podemos comenzar a dar las señales correctas generando de a poco mecanismos de incentivos virtuosos de la actividad económica y tal vez no debamos recurrir a otro salto devaluatorio, o podemos seguir flotando y perdiendo tiempo. Veremos que camino tomamos.
Q

No hay comentarios:

Publicar un comentario