El miércoles 26 de marzo pasado
escribía lo que sigue (entre comillas), no he cambiado ni una coma. Los que
estén interesados pueden chequearlo aquí.
“En el día de hoy 26/03 muchas de las
cuestiones económicas pasaron por si la confirmación de crecimiento del último
trimestre del PBI de 2013, que el INDEC publicará mañana (por el jueves 27/03),
terminará por gatillar o no el pago del cupón PBI. Recordemos que si el número
da por encima de 3,22% de crecimiento para el 2013, corresponde por condiciones
de emisión pagar a acreedores la friolera de USD 3.500 millones
aproximadamente. Ahora bien, es necesario dividir acá el análisis técnico del
político. La cuestión técnica ya ha sido expuesta, vayamos entonces a la
cuestión política. Ya sabemos que desde 2007 las cifras oficiales se han vuelto
poco creíbles y aquí una primera cuestión central; vieron cuáles son las
consecuencias de no decir la verdad, o cuando menos una aproximación a la
realidad? Evidente, que cuándo lo intentás hacer no sos creíble, como en la
parábola del lobo. Ahora en cambio de sub-estimar, sobre-estimamos. El gobierno
nacional dice que argentina creció en el 2013 4,9% cuando en promedio los
privados calculan aproximadamente un 3%.
No creo que el dato oficial de mañana difiera mucho del estimado, aún con la
modificación del año base. Justo es reconocer que cuando en el 99´se cambió el
año base, las revisiones dieron a la baja. Otros tiempos, muy malos por cierto,
pero igual seamos honestos intelectualmente y otorguemos el beneficio de la
duda. De todas formas todo parte de un pecado original que es la
manipulación de datos oficiales. Pero entonces, seguimos tirando un número que
no es verdadero? Y lo haríamos con el solo objetivo de pagar el cupón PBI?
Justo ahora queremos quedar bien con los acreedores? Ciertamente son demasiadas
preguntas y demasiadas especulaciones que no pueden ser respondidas sino a
fuerza de mayores especulaciones.
Como en mi opinión hace tiempo que
este tema ha dejado de ser técnico, prefiero ir por la contraria antes que
intentar inútilmente responder las preguntas anteriores. Supongamos que el
INDEC revisa el número y termina en 3,10%, o sea 0,12% menos que lo necesario
para gatillar el cupón. Obviamente sería un escándalo sobre el escándalo,
puesto que claramente se entendería como una nueva manipulación para no pagar.
Pero no sería manipulación!, sería un dato real!. A sí? Para quién? Recuerden
la parábola del lobo.
Técnicamente es difícil pensar que
nuestra economía haya crecido 4,9% el año pasado, aún con la nueva metodología
de ponderación de bienes y servicios. Sin embargo, ninguna consultora privada
está hoy en condiciones de asegurar con un error no mayor a 0,1% el número de
crecimiento, con el objetivo de fijar el criterio de demarcación de pagar o no.
O sea, poner la discusión en 3,21% zafás, 3,22% pasás por caja sería
claramente un escándalo mucho mayor. En cualquier país serio del mundo lo que
dicen los datos oficiales es palabra santa. Atención aquí, esto no quiere decir
que otros países no manipulen sus datos (aunque lo contrario no me consta), lo
que quiere decir es que los gobiernos gozan de la suficiente confianza y
credibilidad para no ser discutidos permanentemente. Este es el quid de la cuestión.
Es este “capital social” el que el gobierno nacional ha estado echando por
tierra desde hace por lo menos 7 años.
Bien, pero esto define si tenemos que
poner aprox. USD 3.500 millones o no, que le cuestan al país y que seguramente
saldrán de las reservas! Es una locura hacerlo si no corresponde, dirán
algunos. Muy cierto, pero como dije inicialmente, hace tiempo que este tema ha
dejado de ser técnico para convertirse en político. Piense, si el gobierno
rectifica y define no pagar, porque ahora deberíamos creerle? Acaso no vendrían
nuevas críticas locales e internacionales? Indudablemente sí. Cuando nos cuesta
saber dónde estamos parados se hace aún más difícil encontrar un dato verosímil
desde donde partir para tomar como referencia. Es por esta razón que es
absolutamente necesario shockear a la economía recreando un escenario de
confianza y de expectativas desinflacionarias. Un mayor dato de PBI también
tiene que ver con el hecho que la economía argentina es inflacionaria hace 7
años. Lo cual solo nos muestra un diferencial nominal pero no necesariamente
real.
A propósito, ayer escuchaba que el
Plan del BCRA es manejar con “sorpresa” el tipo de cambio. Cuántas veces cree
Ud. que se puede engañar al mercado? Cuando hablo de mercado no solo pienso en
el cambiario y financiero. Tanto los claustros académicos más encumbrados del
mundo como la praxis misma, aconsejan dotar a los agentes económicos de una
serie de indicadores y marco de política económica absolutamente explícito y
bien comunicado, ninguno habla de “esconder” la estrategia. Por qué? Porque de
lo que se trata es de disciplinar a los agentes y “llevarlos” al lugar que
deseo como decisor económico. Si escondo las cartas todo el tiempo, termino por
crear un desbarajuste de proporciones épicas. Piense en la política de la
Reserva Federal de EE UU. Podemos estar o no de acuerdo, pero no podemos negar
que tanto su Chairman Yanet Yellen, como los gobernadores de la entidad se
pasan horas hablando. Es más, la primera habla y la semana posterior salen los
segundos por si quedaron cabos sueltos. Por supuesto se hace explícito un
statement (comunicado) sobre el estado del arte de la economía americana que
conforma el sustento de la decisión de política monetaria. En este sentido es
muy interesante ver lo que pasó el miércoles 19/03 cuando la FED solo cambió
una frase del mismo y los mercados derraparon. Cuando en conferencia de prensa
le preguntaron a Yellen sobre cuando sería posible un aumento en la tasa de
referencia, ella manifestó: “tal vez pocos meses luego de finalizar la
reducción de estímulos (tapering)”. El “calendario” dice entonces que podría
ser entre abril y mayo de 2015. Rápido de reflejos los agentes hicieron su
lectura: “la FED adelanta la suba de tasas 6 meses y es el comienzo del tightening
(endurecimiento monetario)". Algunos dicen que lo dijo por inexperta,
otros que adrede. Lo cierto es que se habla mucho y con cuidado. En este caso
hablar mucho parece ser bueno. También hay que hacer mucho y ser consecuente.
No pretendo con lo anterior poner en
pié de igualdad los dichos de los presidentes de los bancos centrales de EE UU
y Argentina, pero sí reflejar lo importante de “disciplinar” a los agentes
económicos. Las buenas prácticas deben ser tenidas en cuenta. En fin, mi
opinión sigue siendo la misma. Son momentos para ser pragmáticos. Si el ejemplo
comienza por casa, intentemos nosotros también ponerlo en práctica. Si por las
razones que fueran el gobierno quiere pagar, pues entonces que lo haga ahora y
que deje lo más allanado posible el camino para la próxima administración. Lo
que mandan son los números oficiales, y en este caso más que nunca. Por segunda
vez, corresponde técnicamente? Tengo enormes dudas al respecto, pero aquí lo
técnico está en el décimo subsuelo.”
Ok, por que elegí exponer el
análisis? Porque como analista uno se encuentra todo el tiempo contrastando con
la realidad para cotejar si le “pegaste” o no. Bien, veamos en forma rápida y
sencilla. Dije que no creía que el gobierno fuera a revisar fuertemente a la
baja el dato de PBI anticipado en 4,9%. Claramente me equivoqué y no solo yo
fui sorprendido. O sea hasta ahora el cupón PBI (aprox USD 3.500 millones) no
se va a pagar, aunque en septiembre habrá una nueva revisión. También dije que
otorgaba el beneficio de la duda dado que la nueva medición producía un cambio
del año base de cálculo (cambia 1993 por 2004). Acá no me equivoqué tanto.
Ahora bien, si leen bien el artículo verán que el significado general del
mismo, esto es: la cuestión no es
técnica sino política, lamentablemente parece ser bastante parecido a la
realidad. Por qué? Porque ahora la mitad de la biblioteca dice que es bueno y
la otra mitad que nadie puede confiar en este número, que es mala señal hacia
el contexto internacional y que aumentará la litigiosidad. Por qué existe este
abanico tan amplio de opiniones? Para ser franco en primer lugar porque somos argentinos,
pero además por lo que mencionaba más arriba. El gobierno nacional ha estado
despilfarrando capital social a partir del 2007 con la “intervención” del
INDEC. Ahora una mitad cree y la otra no.
En lo personal creo que un 3% de
crecimiento para el 2013 es más realista y por lo tanto entra dentro del
significado de la frase “sinceramiento”. Como consecuencia me parece una buena
señal dado que el no pago del cupón PBI tiene una base más sólida desde donde
explicarlo. Querías sinceramiento, tomá sinceramiento. Querías ficción? Mejor
no me meto con esto. Aunque sigo sosteniendo que la cuestión es eminentemente
política, no dudo que un 3% es por lejos más realista que el 4,9% del cálculo
previo. Argentina definitivamente no creció casi 5% en 2013. Además serán USD
3.500 palos menos que quitar de las reservas. Por lo pronto los cupones PBI, en particular el TVPP, está cayendo aproximadamente 48%. Ni hablar, ayer Argentina hizo la Doble
Nelson, cuponazo y tarifazo. Del segundo hablaremos luego.