Como Argentina es todo menos
aburrido, nuestra Presidente nuevamente nos sorprendió con un nuevo
anuncio. Elevó al Congreso Nacional un Proyecto de Ley para cambiar el
domicilio de pago (para algunos, jurisdicción) de los bonos performing,
pensando en los cupones de los bonos Discount incumplidos a causa del fallo y
en el pago del cupón de los bonos Par que se viene en setiembre. El proyecto
habilita al Ministerio de Economía y Finanzas Públicas para arbitrar los medios
necesarios de tamaña empresa y designa a Nación Fideicomisos como nuevo trustee
borrando de un plumazo al Bank of New York Mellon. Si, así como lo escucha,
Nación Fideicomisos. Además el proyecto deja la puerta abierta para estructurar
un nuevo canje bajo jurisdicción local en caso de recibir pedidos de cambio de
jurisdicción y ley aplicable de parte de tenedores de bonos ley extranjera
(Reverse Inquiry). Esto último no es menor dado que otorga carácter de
VOLUNTARIO al mismo.
Ni lerdo ni perezoso el gobierno “asoció”
al congreso y al arco opositor en esta impericia de proporciones épicas. Claramente
ahora los obliga a tomar posición, embretándolos en una decisión que tanto sea
negativa como positiva respecto del voto al proyecto, igualmente tendrán que
explicar.
Las implicancias de este nuevo
giro son enormes y las posibles consecuencias negativas también, aunque todo
queda por ahora en el terreno de las especulaciones, lo cual eleva la
incertidumbre en una economía que no tiene respiro. Disculpas mediante, a
continuación solo presentaré las dudas que por estos momentos no solo tengo yo,
sino muchos de los especialistas con quienes estuve y estoy en contacto
permanente. Esta mañana tuiteaba: “Increíble, arreglaron todo a billetazos y
en el sprint final les agarró la “culpa”. Ahora en el medio del río queriendo
hacer control de daños”. Realmente no me dejo de asombrar. Arreglar con
Holdouts (buitres incluidos) nos cuesta aproximadamente USD 10.500 milllones.
Similares montos que el arreglo con Repsol y Club de París. Call me naif; pero
no hubiera sido mejor morderse la bronca por un mal fallo, anunciar ahora un
pago a buitres en enero cuando vencen RUFO, mientras ordenás cuestiones legales
y administrativas? Si, no soy tan ingenuo, sé que el tema se ha politizado en
demasía, pero mi testarudez me sigue trayendo la pregunta a la mente. Es que
francamente no logro encontrar ni una gota de lógica entre este escenario, que
es el mal menor, y el brutal abanico de posibilidades que se abre ahora.
Vamos entonces a las preguntas,
que por supuesto solo dejaré planteadas, dado que sería un ejercicio de
especulación extrema intentar responderlas.
- El no acatamiento del fallo podría traer aparejado un desacato. Especialistas dicen que es imposible librar una orden de desacato contra un soberano. No lo sé. De todas formas la pregunta a contestar es; tendremos prohibido por un buen tiempo la opción de emitir bajo legislación New York? Recordemos que es por lejos la plaza más eficiente del globo.
- Desafectamos al BONY y nombramos a Nación Fideicomisos. No está claro que esta entidad cumpla con las condiciones exigidas en el Indenture como fiduciario y pagador. Además; acaso no podría presentar un claro conflictos de intereses? El fiduciario como juez y parte? Por otro lado se supone que los tenedores que no están cobrando, accederán a hacerse de los dólares independientemente de la entidad pagadora. Pero tampoco esta claro dadas las cuestiones legales involucradas.
- No está para nada claro cuáles serán las objeciones, si las hubiera, de la cámara compensadora DTC en cuanto a las garantías en la logística de pago, tanto desde el punto de vista legal como administrativo.
- Supongamos que finalmente se abre el canje local. Que sucedería con los Fondos de Pensión americanos tenedores de bonos performing que no pueden (aunque quisieran) debido a disposiciones de calidad de la cartera, etc., aceptar otra jurisdicción que no sea New York? Esto podría incentivar un sell off de bonos por un lado, pero también posibles aceleraciones?
- Es posible que el gobierno nacional este intentando hacer control de daños ofreciendo esta opción para evitar futuras aceleraciones de la deuda. En definitiva se está ofreciendo una opción que antes no estaba. Sin embargo una cosa es nuestra propia óptica sobre como analizar el contexto y otra muy diferente es ponerse en lugar de estos pibes para imaginar cómo piensan. El punto es, qué valor otorgarán a la opción? Si fuera bajo, entonces uno podría descontar un posible fracaso del canje. En ese caso, no se estaría incentivando también mayor aceleración? Y si así fuera, no crearía más Holdouts?
- Y qué tal si el mercado descontaba un arreglo para enero del 2015 y por eso sostenía el precio de los activos argentinos y con esta señal desatás un fuerte colapso?